¡Hola multicubano!
Aunque mi mamá nunca ha sido fan de la cocina, siempre ha tenido un amor platónico en este ámbito y es con la Olla Reina. Si mal no recuerdo ya va por la sexta que le compro desde que me fui de Cuba, y a cada rato repite que sin ella no puede vivir.
Si de casualidad se le rompe, ya podemos ir preparándonos para la molestia que tendrá al día siguiente, eso si no consigue que en el taller le arreglen el desajuste o rotura que sufra.
No tengo claro si es que salen malas o es que ella es un esmeril. Quizás es porque ser la Reina de la cocina en casa de mi mamá implica lo mismo hacer un potaje, una carne, un arroz, que unos dulces pero tiene que usarse a diario.
En su defensa nos dice que ahí todo queda mejor, que no hay carne, por dura que sea, que aguante la presión de una reina. Por si fuera poco, alega que esta no explota como las otras ollas de presión tradicionales, que es más segura y al funcionar con electricidad la cocción es más limpia.
Por mi parte, he de decir que también en ocasiones me representa un alivio, tengo una en casa y siempre que quiero ahorrar tiempo la uso. Creo que todos al salir de Cuba nos vamos con algunas costumbres arraigadas y cocinar en olla reina viene de antaño.
Quizás no lo sabías, pero esta olla se remonta a hace 350 años cuando la cocina a presión se hizo popular durante la II Guerra Mundial, la gente se dio cuenta de cuánto combustible se podía ahorrar con las ollas rápidas (cocina a más del doble de velocidad que una olla normal).
Otro dato es que como el tiempo de cocción es corto, podremos conservar hasta un 50% de las vitaminas y minerales de los alimentos, con lo cual, mejoramos su sabor.
Según mi mamá con la Reina puedes cocinar con los ojos cerrados. La programas y puedes irte tranquila a hacer otra cosa. El reloj termina de dar la vuelta, se dispara y se mantiene en el modo de calentar, para ella todos son beneficios.
Y sabiendo de esta fuerte atracción, cuando supe que su quinta olla se le achicharró (vaya usted a saber cuánto trató de arreglarla, pero esta vez no aguantó más, la pobre), enseguida aproveché la oferta de Olla Reina disponible en la tienda online de Multicuba y le mandé una nueva para que cocine feliz.
Con tan solo dos días que demoró la entrega mi mamá no tuvo tiempo de sacar el despecho y el dolor que le dejó su pérdida, a estas alturas ya debe haber probado al menos un congrí.
Ahora que ya te compartí las mieles, si tú también tienes alguien cercano en tu familia tan fan de esta olla y sabes que la está deseando, sorpréndelo/a, dale el detalle y que la Reina llegue a su cocina.
Por último, déjame saber en los comentarios si también tienes debilidad por esta olla o quién de tu círculo cercano no puede vivir sin ella.
6 Comentarios al Artículo:
La reina de la cocina
Interesante lo de la 2da Guerra Mundial
Siempre se aprende algo jeje 😁❤️
Bien puesto que tiene el nombre: la reina
Nadie manda más que ella 😎❤️
Creo que soy yo la fanática de la reina jjj
Jajajaja somos unos cuantos ❤️
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